Dicen que son los gatos los que tienen que elegir te a ti, no tu a ellos, y yo tuve la gran suerte de que mi pequeño me eligió a mi y fui y seré la persona más feliz del mundo por haber tenido ese privilegio.
Fue solo un año, pero lo he sentido como una vida entera.
El día que te rescaté no se quien de los dos tuvo más suerte, porque estoy segura que dos almas separadas se unieron ahí.
Nunca olvidaré tu vida, ni tu mirada, ni todas tus tonterías, ni tus guantazos, ni cuando me buscabas para tumbarte a mi lado, o cuando venías a pedir comida… En definitiva nunca te olvidaré Moskú.
Porque has calado en lo más profundo de mi corazón.
Te amo mi niño, mi angelito.
Descansa en paz allá dónde estés, y no te olvides de cuidarme, a mi y a tu familia.
GRACIAS VIDA ❤️
Moskú
2018 -
2019