Me acuerdo cuando te cogí en brazos por primera vez, salí corriendo a buscar a Catí y a Borja.
Ese fue el momento en te convertiste en especial para nosotros, estábamos los cuatro embobados mirándote, Na Lluneta te adopto como hija suya.
Ellos aprendieron a querer a alguien que no era humano y fuiste su mejor compañera de juegos.
Con los años los juegos pasaron y te convertiste en mi fiel compañera, paso que yo daba, paso que dabas tu, cuantas veces abre dicho, me feras cauré!!!!!!
En casa se enfadan cuando yo digo, pero si ella me quiere más que nadie en este mundo, me ha visto llorar más que nadie y le he contado cosas que nadie sabe, quizás no entendiera pero si sabia, si me dolía o me hacía feliz.
Han sido tantos los mometos felices que nos has dado que si no hubieras estado no los tendríamos.
Somos unos pocos los privilegiados que queremos así y sobre todo como nos quieren.
No todos entiende esta forma de querer pero la verdad es que poco me importa.
Hoy te he vuelto a coger en mis brazos como lo hice la primera vez, esta vez me dolía, era un sentimiento diferente pero igual de intenso.
No es un Adios porque tu vivirás siempre en nosotros.