El día 21 de febrero de 2018 tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida, tuve que dejarte marchar después de 14 años siendo mi familia, mi mejor amigo, mi compañero y no sabes cuanto me hubiese gustado poder seguir contigo unos cuantos años más, tu que has estado siempre en las buenas y en las malas, siempre tu tendiendome una pata amiga, se perfectamente que era lo que tu querías, ya estabas cansado y te querías marchar, pero te echo tanto en falta, cuando escuchabas una sirena y parecia que te convertias en lobo, en los ultimos años cambiaste mucho necesitabas mucho mi ayuda pero eso no era ningún problema, ahora ya nadie me llena el suelo de agua por meter sus orejotas en el cuenco, ya nadie necesita mi ayuda, ya no estas tu y no sabes cuanto duele, vuela alto cariño y se feliz allí arriba, espero que algún día volvamos a reunirnos y ya no nos tengamos que separar nunca más, te amo y no te olvidaré jamás mi niño, gracias por tanto ❤