Descansa mi pequeña Pulguita,
rescatada del abandono, amada hasta el último suspiro. Fuiste luz, consuelo y alegría durante quince años inolvidables.
Si la vida me diera otra oportunidad, te volvería a elegir, sin dudarlo.
Gracias por cada mirada, cada ronroneo, cada día a mi lado.
Siempre en mi corazón. 🖤