Hasta pronto. Te has ido hace una semana y hoy estarás corriendo detrás de pelotitas, machacando palos o chuperreteando todos los pises posibles, dejando tu huella en cada árbol o farola de ese cielo de los perros donde te has ido. Mi vida, te hemos querido, te queremos y te querremos siempre. Contigo se va medio corazón y el otro medio se queda aquí para recordarte. Siempre conmigo mi Sam, siempre conmigo.