Tanguete,
tú me elegiste aquel 27 de abril del 2004, encerrado en una patética jaula de Son Reus con esa mirada…
10 años de tantos mimos, paseos, boda, viajes y más mimos. Absolutamente todo el mundo que te conoció te quiso y admiró x tu tamaño, x tu nobleza, x ser tan crack con otros perros, gatos y niños. Si algo me enseñaste durante tu enfermedad, fue a no auto-compadecernos. Luchaste como el mejor, y te recuperaste. Marcaste una etapa en mi vida, en nuestras vidas y bien sabe Dios, que mientras lata mi corazón, estarás conmigo, con nosotros. Te echamos de menos, mi alma, mi cabezón, mi hijo. Gracias Son Batlet x el respeto y empatía. Claudio, Anahi, Mia, Negri, Alegra y Sagres